Hotel Paula Films Collection
Diseño de hotel
- Mérida
- 2022
ÁREA TOTAL
725 M2
ClientE
Hostelería Carpe S.L.
ServicIOS
Diseño de espacio y experiencia
sobre el proyecto
Cuando me contactó Asensio para contar conmigo en su nuevo proyecto, me hizo doble ilusión. Primero, por volver a trabajar con la familia Masegosa, que es siempre un gusto, y, segundo, por hacer un hotel en Mérida que no tuviese nada de temática romana.
Y la guinda del pastel la puso su localización: el antiguo hotel Cervantes. Que se encuentra frente al emblemático cine Maria Luisa, ahora convertido en Teatro Maria Luisa. Mejor sitio, imposible.
La familia Masegosa no quería que la temática fuese simplemente un elemento decorativo, sino crear una experiencia diferente para el cliente.
Con ese objetivo en mente, decidimos dividir la temática de la siguiente manera: la fachada y recepción diseñadas para parecer la entrada de un cine, escaleras y pasillos con imágenes de película a gran escala, que generasen una experiencia inmersiva, y habitaciones dedicadas a cada director, como si fuesen camerinos.
Para llevarlo a cabo, completamos el equipo con los diseñadores de Condimento Gráfico.
HABITACIONES
Cuando empezamos a trabajar y vimos el estado del hotel y sus problemática, teníamos claro que habría que invertir mucho en todo lo que no se ve en un proyecto (aislamiento acústico, instalación eléctrica, …), por lo que había que reutilizar y aprovechar todo lo posible para recortar otras partidas. Como el suelo no se iba a cambiar, decidimos llevar el protagonismo a las paredes.
En las habitaciones, aprovechamos que teníamos que crear falsas columnas, para el nuevo cableado, para crear un cabecero gráfico. Utilizamos las columnas como si fuesen los bordes de un carrete de película, enmarcando y ensalzando el fondo del cabecero.
Donde había cama única, colocamos un fondo de techo a suelo, empotrando las camas entre las columnas para ganar más espacio. En las habitaciones dobles, decidimos cerrar la parte baja del hueco para facilitar la doble distribución: camas juntas o separadas. Esta configuración la utilizamos también en las habitaciones triples, para poder desplazar la cama doble cuando se necesitase la cama auxiliar.
Usamos el fondo de los armarios sin puertas, para facilitar su uso, para añadir más películas del director, integrándolos así en el diseño de la estancia.
Escogimos un mobiliario sencillo, realizado por carpintería Figueroa, que acompañase sin robar protagonismo, y utilizamos cortinas de pared a pared, rememorando las antiguas salas de cine. Para completar el diseño, nos decantamos por una iluminación indirecta que crease un ambiente cómodo y acogedor, que conseguimos gracias a la ayuda de la ingeniero técnico industrial Chelo González y la empresa lumínica Ilutrek.
En los cuartos de baño, cambiamos las bañeras por duchas, revestimos las paredes con azulejos sencillos, abaratando los costes, y reutilizamos el resto de elementos, añadiendo vinilos en las mamparas y luces de tipo camerino, que dieron el toque decorativo y crearon una atmósfera diferente a bajo presupuesto.
pASILLOS Y ESCALERA
En los pasillos no se iba a tocar apenas nada. Puertas, suelos y revestimientos quedarían igual.
Para desviar la atención de esos elementos, pintamos de azul profundo paredes y techos, generando un espacio envolvente. Revestimos las paredes con vinilos de las películas más míticas, recortando el fondo para fusionarlo en el espacio y que no fuese un conjunto agobiante, completándolo con carteles de película sobre soporte rígido.
Enumeramos las puertas con vinilos, respetando su forma, con el nombre del director al que dedicábamos la habitación y una imagen suya.
Para desviar la atención del suelo, utilizamos una luz continua de tira led efecto neón que diseñamos en 3D para luego aplicar en el espacio.
Replicamos el diseño en las escaleras, simplificando la iluminación, dedicando las imágenes a un público más infantil.
rECEPCIÓN Y FACHADA
En la recepción, hicimos un cambio radical. Cambiamos la distribución para añadir una almacén y un aseo, que dedicamos al camarote de los hermanos Marx. Cambiamos el suelo, añadimos molduras doradas con iluminación integrada, utilizamos elementos decorativos como las sillas de director, focos y butacas de cine. Y diseñamos una recepción digna de una taquilla clásica de cine, con cartel retroiluminado incluido.
Para la fachada, sabiendo que era un edificio que pasaba desapercibido a pesar de su ubicación, escogimos una combinación de rojo y gris claro que la hiciese destacar en el entorno y colocamos una marquesina iluminada que marcase la entrada, dándole ese aspecto de cine clásico.